Patricia tenía una sensación de pesadez todo el tiempo, parecía que el tiempo la abrumaba por completo. Sabía que necesitaba un cambio, pero no tenía claro qué ni cómo hacerlo.

Entre una charla de amigas, se dio cuenta que viajar sola era una opción para encontrar el orden de sus pensamientos y metas. No era necesario salir del país, estaba en Costa Rica, un paraíso exótico líder en biodiversidad.

Quería un sito libre de la masificación de turistas, sereno y encantador por lo simple. Que le permitiera desplazarse caminado o en bicicleta mientras conocía el entorno natural, sin horarios ni tiempos de regreso.

Lo que en realidad Patricia necesitaba era un destino ecoturístico, la buena noticia es que en nuestro país la oferta es tan amplia como seductora. Y es muy motivador, porque en un solo destino puede encontrar tanto actividades de montaña como de playa. ¡Nos dimos a la tarea de hacer esto una realidad!

La intención de estas zonas es dejarse fascinar por la belleza de lo simple, reconectar con la esencia de una actividad que realmente llena y transforma, sin necesidad de lujos exuberantes que nos aprisionan en la sensación de ciudad. La posibilidad de hospedarse en un hotel que tiene por pasillos senderos que recorren la finca y los tepezcuintles o ardillas las cruzan sin timidez, es algo único.

Se impulsa al visitante a interactuar con el entorno para que el cambio de perspectiva sea algo muy personal. El simple hecho de dormir con paredes de cedazo que permiten el arrullo de los grillos y la fauna nocturna es mejor que el bullicio de huéspedes hablando por doquier y música de fondo.

En nuestros tours  Patricia pudo encontrar espacios para observación de las aves, visita a los sitios de protección de animales, ríos, la noche decorada con caminos de hongos luminiscentes y la imponencia de una luna y un cielo estrellado que no son opacados por las luces de la ciudad.

A su regreso tenía un álbum fotográfico impresionante, que muchos de los turistas complementan con paseos a caballo, tour corto en bicicleta y senderismo. ¿Se puede imaginar que belleza de vistas? Ya en casa se le percibió un nuevo ánimo, el ecoturismo no solo impulsa la salud física y mental, en estos momentos es una opción ideal de reactivación.